miércoles, 2 de julio de 2008

en las nubes (para variar)

Parece que escribiendo tu nombre en la hoja de estudio, en un papel cualquiera, una y otra vez, en mil tipos de letras distintos…escribo y escribo tu nombre como si de alguno de ellos fueras a surgir y aparecer en mi cuarto. Cuando veo tu nombre en cualquier lado escrito, cuando lo escucho, algo se alborota dentro de mí. Pero no es tu nombre, no es que tu nombre sea el nombre más bonito, es que tú le haces el más bonito. Quiero llamar a mi hijo como tú, pero detesto eso de que padres e hijos se llamen igual, pero lo quiero llamar como tú… tendré que buscarle otro padre :P
Te echo de menos, te pienso y te repienso, fantaseo, me imagino contándote las cosas que me pasan… miro tus fotos. Leo y releo los mensajes. Las imágenes y pasadas palabras retumban en mis oídos. Y ansío que llegue [...], y estar así junto a ti, [...], tumbado con la cabeza apoyada sobre mis piernas, y yo aprovechando para perder mis dedos por tu pelo, acariciar tu cara, tus espesas cejas, tu barba, tu nariz, tu mentón, tus párpados, tus orejas, el contorno de tus labios… imagino tus ojos cerrados y aun así incapaces de ocultar el placer que estas sintiendo. Entonces pararía y no tardarías en abrir los ojos y mirarme, y con esa tímida sonrisa de labios apretados con la que sueles asentir cuando estás cariñoso, me harías algún gesto pidiendo disimuladamente que siguiera… [...] y tu mano sube y me acaricia la cara… y mis labios celosos de mis dedos bajan para acariciar tus labios… es una jugosa caricia, suave, húmeda… la emoción e ilusión acelera nuestras respiraciones que se van entrecortando a medida que aumenta la pasión. Mis labios ya recorren tu cuello… abrigados en un abrazo apagamos un llanto que no se cree lo que está pasando… y nariz con nariz nos miramos tímidamente… entre risitas, lágrimas y tiernas sonrisas sentimos una inmensa paz interior… y nos quedamos dormidos, juntos, abrazados, en el césped, un césped que acabamos de bendecir con todo nuestro amor. Amanece, arrugas la nariz y con los ojos entrecerrados te estiras y me dices con tu acento ese Buenos días tan delicioso, que aunque dijeras malos días serían los mejores del mundo. Me besas y nos vamos a desayunar un cruasán a la plancha :)

3 huellas:

Anónimo dijo...

Maria: Tus escritos son deliciosos, tienes una eleganacia,sensibilidad,ternura,enganche... y es que escribes muy bien y creo que con el corazon. No ambies. Yo te sigo desde la distancia.

María dijo...

jo! muchísimas gracias!! :)
gracias :)

María dijo...

quién eres?